miércoles, 4 de diciembre de 2013

SALVADOS POR EL COMETA ISON


El Cometa ISON


   Tras el castañazo en tierras portuguesas, los aeronautas comprobaron que no se habían roto ningún hueso, pero sí la ropa, más de uno había quedado con el trasero al aire. Marco Polen mostraba un buen cachete y debido al frío, empezó a ponerse color berenjena. El desgarro en el pantalón de Laura, dejaba ver su entrepierna arañada, y de inmediato los miembros de la expedición se ofrecieron a curarla, aunque no tenían ni agua.

   Maica tenía un esguince, Lolta con la magia heredada de su abuela, logró colocar el tobillo en su sitio. El grito de tarzana que lanzó, les hizo temer que hubiese alertado a los habitantes del pueblo. También era doloroso lo de Juanan, las cápsulas castañeras se le habían enganchado no solo en el bigote, también en la barba; intentó quitárselas y se quedó con medio bigote en la mano o lo que es lo mismo, se parecía a Charlot, pero se portó como un jabato; no lanzó ni un ¡Ay!, los lagrimones eran del tamaño de aceitunas. La doctora Ros tampoco se libró del doloroso aterrizaje, las castañas se le clavaron en las rodillas y su caminar era bastante lento.

   Pedro dada su experiencia de paracaidista, había caído de la cesta con cierto estilo, lo que no le libró de tener adheridas castañas por toda la barba, aprovechó para depilarse y guardarlas, sin cápsulas, en los múltiples bolsillos de sus pantalones, un inconveniente a la hora de caminar, ya que los bultos parecían proceder de su anatomía y con el peso el pantalón tenía tendencia a ir hacia abajo, tenía que andar sujetándolo.

   Todos eran partidarios de dirigirse al pueblo, pero no podían dejarse ver con su aspecto, les confundirían con vagabundos y llamarían a las fuerzas de orden público. Estupefactos, comprobaron que los teléfonos móviles y toda clase de artilugios electrónicos, así tuviesen "whatsapp" o fuesen simples "tabletas", no funcionaban, sólo contaban con la brújula de la doctora Ros y eso no les servía de mucho. Recogieron las prendas de abrigo. No tenían otra opción que ir hasta el pueblo y tratar de establecer contacto con los miembros seguidores de su vuelo desde la furgoneta. ¿Dónde se habrían metido?.

    Llegaron a un corral en las afueras del pueblo, al fondo había una nave cubierta, cuya puerta estaba abierta y entraron en ella. No podía decirse que el lugar oliera a flores campestres. Había un gallinero con una docena de gallinas, una pocilga con dos cerdos y una cuadra donde rumiaban media docena de ovejas. En el recinto había sacos de pienso, paja, cestas colgadas del techo con tomates y pimientos. Un grifo con una manguera enrollada y al lado, un perchero con una toalla y algunas prendas. En otro rincón, una pequeña chimenea con leña y unas sillas. Cuando el olfato se adaptaba al lugar, no resultaba tan desagradable, al menos no tendrían que pasar la noche a la intemperie, había comenzado a anochecer.

   Laura apenas había puesto un pie en el interior y empezó a estornudar, era alérgica a toda clase de animales, exceptuando algunos humanos. Dijo que ella prefería quedarse fuera, era jueves 28 de noviembre, podría ver el cometa ISON, a simple vista. Su chaqueta de ¿cuero?, la mantendría caliente. Juanan se consideró en la obligación de acompañarla, pero ella dijo que nones, aunque cambió de opinión al ver que se envolvía en una hermosa capa.

  El hambre había hecho su aparición y solo contaban con las castañas de Pedro, las miradas se dirigieron hacia los huevos que reposaban en los ponederos. Después miraron detenidamente las ubres de las ovejas, ¿quién de ellos sabía ordeñar?. Marco Polen, pensó que aquello no sería tan difícil, abrió el cerrojo y se dirigió resuelto hacia la primera que vio, se puso en cuclillas frente a ella, (había olvidado la rotura trasera de su pantalón) al animal le bastó un cabezazo para dejarle sentado en el suelo con las cagarrutas.

  Mister Polen estaba "impregnado", se dirigió a la manguera y abrió el grifo, un escalofrío le recorrió el cuerpo con solo lavarse las manos. Probó a quitarse los pantalones, sin rozar las deportivas zapatillas de marca extranjera. Alcanzó un largo abrigo y se lo puso, le quedaba un poco estrecho pero tapaba su parte trasera, en cuanto a la delantera, se ató una cuerda a la cintura. Tendría que andar despacio.

  Lolta había cogido un cubo de zinc y lo dejó al lado de la oveja, empezó a acariciarla y dirigió sus patas traseras hasta el cubo. Tenía experiencia ganadera, con gran decisión comenzó a hacerlo y a los pocos minutos empezó a caer la leche en el cubo.

  Maica y la doctora Ros sentadas en las sillas, intentaban encender la chimenea. Desde fuera, empezaron a llegarles las voces airadas de Laura y Juanan hablando con una persona que irrumpió en la nave. El hombre llevaba un gorro calado hasta las orejas, una garrota en una mano y un teléfono móvil en la otra, le seguía un perro que no dejaba de ladrar y mostraba sus dientes a los intrusos, aunque no parecía que fuese a utilizarlos.

   Laura con su mal portugués, aprendido en un viaje a Brasil, trataba de hacerle entender que habían caído del cielo, pero aquello no dejaba de enfurecer al pastor que pensaba le estaban tomando el pelo y más al ver que estaban ordeñando sus ovejas, que los huevos estaban en su paellera, a punto para ser comidos y el ¡colmo!, aquel individuo se cubría con su abrigo más largo y se lo sujetaba por delante con las manos.

   De pronto, un enorme fogonazo llegado del cielo inundó toda la nave y salieron todos al corral para contemplar el cielo como papamoscas. El pastor miraba hipnotizado, se quitó el gorro y se rascó la cabeza, llevaba el móvil en la mano, a su lado la doctora Ros le indicó que hiciese fotografías al cielo. Estaba perplejo, comenzó a hacer fotografías, comentó en español.

-  Me parece una "bola de nieve sucia" con luces.

-  En realidad, -contestó la doctora- los cometas son bolas de nieve que se acercan al Sol y se transforman en luces brillantes al atravesar la atmósfera.

- Digamos que llevan una doble vida, son una mezcla de hielos, tanto de agua como de gases congelados y polvo. -Dijo Mister Polen- Creemos que contienen materias residuales de la formación del Sistema Solar, de eso hace cinco mil millones de años

- ¿Qué pasará ahora? Preguntó el pastor- He oído decir que sucederán catástrofes...,

   Por el camino llegaba un jeep con una pareja de gendarmes que solo hablaban portugués, el pastor se dirigió a ellos y señalaba a los aeronautas, los gendarmes miraban a los de la NASAL y movían la cabeza negativamente. ¿Quién en su sano juicio iba a pensar que eran unos personajes, viendo su aspecto? Comenzaron a esposarles y meterlos en el jeep, antes de que terminaran de entrar, el pastor se dirigió a la doctora.

- He intentado que los dejaran en paz, pero no me creen -viendo la perplejidad ante su lenguaje, comentó-, mi familia es extremeña. ¿Qué pasará ahora con el cometa?

- Si sobrevive a su encuentro con el Sol, -la doctora subía al vehículo- dará un buen espectáculo pero desde aquí no lo veremos, solo lo verán dentro de unas semanas en el hemisferio norte.


   El vehículo comenzó a rodar, pese al frío y los estornudos, tuvieron que abrir las ventanillas. No había quien aguantara el fuerte olor de establo. La doctora Ros metió las manos en los bolsillos, su mano tropezó con el móvil del pastor. 

Ros de Aristolio (R.J.M./Dic. 2013)
  
NOTA: A finales del 2013 se pudo ver al cometa ISON a simple vista y durante varias semanas. Su enorme brillo, superó al de la luna, en algunos lugares, incluso se pudo ver de día.
El cometa ISON sobreviviría en la mente de todos.






3 comentarios:

Vichoff dijo...

Qué intriga, Rosa preciosa.
¿Cómo acabará la aventura?
Me ha encantado.

Rosa del Aire dijo...

¡Gracias, Vichita del Turia! Comprenderás que..., solo un adelanto, volverán antes de la Navidad. ¡Ja,ja,já!
Besitos.

Pedro Mateos dijo...

Sí, que las navidades son cosa sagrada, y no lo digo sólo por religión sino porque se pasan en familia, a ser posible, que no todos pueden. Y a los que no puedan les deseamos Felices Fiestas y mejor año el próximo que este ha sido un poco jodido.